Todos nuestros procesos están integrados en un sistema de mejora continua. Así garantizamos la calidad de todos ellos, su correcta planificación y ejecución con una productividad óptima.
Cada producto tiene una ruta de procesos única que sufre fases de desarrollo, reproducibilidad, validación e industrialización. De esta manera se garantiza que la ruta sea la correcta, logrando tener el producto que queremos.
Durante el proceso de validación, se realizan con rigor las siguientes tareas:
- Un ajuste de los parámetros de calidad que se mide en cada uno de los procesos.
- Efectuamos una formación del personal de cada proceso.
- Definimos las características finales de la piel.